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Correo Científico Médico de Holguín 2002;6(4)

 

Trabajo original

 

Facultad de Ciencias Médicas, “Mariana Grajales Coello”, Holguín.

 

La enajenación del sujeto y sus repercusiones en la salud.

 

The alienation of subject and its repercussion on health.

Milvio Alexis Novoa Pérez1, Isabel Cristina Hernández Ramón2, Miguel Díaz Rodríguez3

1 Profesor Auxiliar, aspirante al grado de Doctor en Ciencias Filosóficas.
2 Profesor Instructor de Filosofía y salud, Metodologa de Ingreso.
3 Profesor Instructor de Cultura Física.

 

RESUMEN

 

En el presente artículo se aborda uno de los problemas más contradictorios en el área de las Ciencias Sociales y de la Salud. Las repercusiones de la enajenación de los sujetos y de su actividad sobre la salud.

El principal propósito del mismo es contribuir al fortalecimiento de posturas humanistas y revolucionarias en nuestros profesionales y demás sujetos de la salud frente a condiciones sociales potencialmente enajenables y/o enajenantes, por lo tanto contrarias a la naturaleza y prácticas profundamente humanistas de nuestra Revolución.

Aportamos un criterio filosófico que supera la dicotomía que caracteriza a los estudios científico – particulares al respecto, carentes de una visión integradora. Sobre la base de esta solución teórica construimos un modelo que permite identificar algunas de las principales repercusiones de la enajenación sobre la salud en sus diferentes niveles de manifestación práctica.

 

Palabras Claves: Enajenación, Alienación, Enajenable, Enajenante, Relación Social, Ciencias Sociales, Ciencias de la salud.

 

ABSTRACT

 

One of the most contradictory problems in the social sciences and health areas: the repercussions of the alienation of the subjects, of their activities and the results of these activities on health is approached in this article.

The main goal of this work is to contribute to the strengthening of the humanist, and revolutionary attitudes of our professionals and other subjects working in the health field, facing potentially alienable, and/or alienating social conditions which are therefore opposing to the profoundly humanist nature and practice of our Revolution.

A philosophical criterion overcoming the dichotomy that characterizes the scientific-particular studies carried out on this topic that lack a integrating comprehensive vision is contributed here. Upon the base of this theoretical solution a model is constructed which allows to identify some of the main repercussions of alienation on health in its different levels of manifestation.

 

Key words: Alienation, Alienable, Alienating, Social relation, Social sciences, Health sciences.

 

DESARROLLO

 

Las repercusiones de la enajenación de los diferentes resultados de la actividad del hombre es un problema de creciente actualidad para las ciencias de la salud pues su análisis puede contribuir a comprender en qué medida todo el potencial científico y tecnológico que ha acumulado la humanidad favorece o impide el desarrollo humano y transformarlo, ya que comprender los factores que determinan la aparición de un fenómeno social negativo y su persistencia es el primer paso para superar las condiciones sociales que lo sostienen y de esa forma asumir una actitud humanista y revolucionaria ante la vida en el plano práctico.

 

En el artículo que te proponemos se han resumido algunos de los resultados más importantes de la elaboración teórica de la categoría enajenación, realizada por autores marxistas, no solo porque el marxismo es inseparable a la lucha por la superación de la enajenación en las sociedades capitalistas, sino porque también recurriendo a él podemos realizar un renovado análisis de las nuevas formas que ha tomado la enajenación tanto en las sociedades neoliberales, como en las sociedades que como la nuestra se empeñan en el complejísimo proceso de construcción de una plena justicia social, que dignifique al hombre y le garantice positivamente el derecho a la vida, la salud, la educación y la libertad para superarse en el plano social e individual.

 

La enajenación como fenómeno es tan antiguo como la división antagónica del trabajo que le dio origen al predominio del trabajo cosificado sobre el trabajo vivo y que convirtió al propio trabajo humano en algo extraño para el sujeto, que al asumirlo como un medio para satisfacer otras necesidades, lo priva así de su carácter creador. Este fenómeno ha sido asociado al predominio de la propiedad privada sobre los medios de producción, que ciertamente es una de sus consecuencias en las sociedades basadas en la explotación del trabajo esclavo o asalariado, sin embargo no es su causa, más bien es su “expresión jurídica y condición de existencia” (Karl Marx Manuscritos de 1844).

 

Es importante aclarar que las obras de K. Marx dedicados al análisis profundo de la enajenación como proceso social contradictorio, estuvieron extraviados en los archivos de la socialdemocracia alemana cerca de 90 años y no fue hasta la mitad del siglo XX que fueron rescatados y traducidos al ruso y al inglés. Esto unido a profundas divisiones entre los investigadores marxistas (del llamado marxismo soviético, marxismo occidental, marxismo latinoamericano, neomarxismo y otras) contribuyó a que se abordara de forma unilateral por cada una de éstas orientaciones, en algunos casos como relación económica típica del capitalismo y que solo se extingue en el socialismo (marxismo soviético) o como reacción subjetiva del individuo contra la sociedad que intenta privarlo de su libertad (marxismo occidental).

 

Ésta aparente contradicción formal refleja la inmadurez de los estudios teóricos acerca de éste fenómeno que a su vez condicionaron las investigaciones empíricas en el área de la psicología y la sociología durante el siglo XX. Para la superación de tal dicotomía nos basaremos en la moderna epistemología de los fenómenos sociales que nos orienta revelar sus aspectos desde una óptica dialéctica: conscientes del carácter inacabado de nuestros conocimientos y su condicionamiento sociohistórico: aplicado a la historia de los estudios acerca de la enajenación, podemos comprender que el enfoque reduccionista que insistió en su carácter exclusivamente material y económico limitó su análisis a las sociedades de explotación económica e inhabilitó esta teoría para conducir el necesario perfeccionamiento que requería el socialismo eurosoviético. El otro enfoque que se limitó a enfatizar sus manifestaciones espirituales al ignorar el vínculo con las condiciones materiales histórico – cambiantes le otorgó un carácter eterno a la enajenación y al declararlo consustancial a toda actividad humana, hace innecesaria ó inútil la lucha por su superación.

 

Resumiendo esta historia podemos decir que por el desconocimiento de los principales aportes de Marx y otras condicionantes históricas que no es objeto de este análisis, la enajenación ha sido estudiada como hecho (revela sus causas), como relación social (enfatiza en sus interacciones y para su estudio integrador es necesario además asumirlo como proceso transitorio y con repercusiones materiales y espirituales utilizando un criterio científico para ésta distinción ( el portador material).

 

A modo de síntesis podemos recurrir al propio K.Marx que distinguió “la enajenación de la cosa de la enajenación del sujeto en su actividad” (Manuscritos de 1844).

 

Esta línea de estudio ha sido recientemente desarrollada por autores como Adam Shaff (la enajenación como fenómeno social 1979) y otro grupo de marxistas contemporáneos que en el plano teórico no se han limitado a buscar en los clásicos la respuesta a las formas actuales de enajenación, sino que han estudiado sus formas nuevas, como los filósofos cubanos Rigoberto Pupo y Pablo Guadarrama entre otros.

 

La enajenación puede ser definida como aquel proceso social transitorio que se caracteriza por la conversión de la actividad humana y sus resultados en fuerzas hostiles al hombre, pudiendo expresarse subjetivamente en la conciencia como divorcio entre aspiraciones personales y las normas prescritas por la estructura social, así como la percepción de estas últimas como hostiles a su personalidad por el sujeto.

 

Para una visión analítica del fenómeno podemos distinguir dos planos de análisis de la enajenación como relación social, atendiendo al portador específico de las relaciones de enajenación:

·        Enajenación objetiva: es la de los productos de la actividad humana, cuando dejan de corresponderse a los fines para los que fueron creados y se oponen a los propios hombres. Pueden ser mercancías, instituciones, normas sociales prescritas por las instituciones así como otros productos ideológicos: concepciones políticas, religiosas, tecnologías científicas etc.

·        Enajenación subjetiva: es la enajenación percibida y vivenciada por los sujetos como sentimientos de alejamiento, soledad, “pérdida” del sentido de la vida y se puede expresar como ruptura con las normas de conducta social, etc.

 

La enajenación objetiva constituye la base de la enajenación subjetiva, por eso su existencia no depende de que el hombre la vivencie o no. Esto explica por qué en las sociedades capitalistas “maquilladas” con sus consignas de “bienestar”, la deshumanización que implican las fuerzas enajenantes del mercado no siempre provoca enajenación subjetiva. Sin embargo, estas son la máxima expresión de la enajenación objetiva en sus diversas formas: el consumo irracional  de los más disímiles productos, la pornografía  en sus diversas modalidades, la drogadicción, el racismo, la xenofobia, el terrorismo, el incremento de la violencia en general, el abuso de los medios de difusión o comunicación masiva y el indetenible daño al ecosistema, entre otros.

 

Sin embargo, la Ciencia y la Tecnología al estar presentes  en todas las esferas de nuestra vida social, familiar e individual, nos brindan grandes posibilidades para aumentar el control sobre nuestras creaciones e ir superando la enajenación objetiva y subjetiva.

 

Resultando que, en dependencia del contexto social donde nos encontramos así será la mayor o menor manifestación de este fenómeno. Así nos detendremos en las mediaciones teóricas que explican en la práctica ¿por qué? por ejemplo en el capitalismo la enajenación alcanza su mayor expresión, resultando incluso la propia ciencia enajenada. Estas mediaciones teóricas permiten además revelar el carácter de proceso de la enajenación.

 

Muchos autores posteriores a Marx, desconocedores de sus obras extraviadas, antes mencionadas, han confundido enajenación con objetivación desde un punto de vista “objetivista”, buscando cientificidad. Es conocida que esta posición fue desarrollada por Hegel, en cuyo sistema idealista objetivo la enajenación del espíritu, como creador, funcionaba en su dialéctica racionalista. Por el contrario en una concepción materialista asumir la identidad de enajenación y objetivación sería convertir la primera en algo eterno, y abstraído de las condiciones sociales concretas, que sólo son históricamente enajenantes.

Para que los resultados de la actividad humana resulten enajenados, no basta con que se objetiven las ideas y proyectos mentales del hombre en la práctica, es decir no todo producto creado por el hombre gracias a la objetivación de sus conocimientos y aspiraciones está fatalmente predestinado a enajenarse, ello va a depender de que las condiciones materiales existentes contribuyan a lo siguiente:

·        Que los productos objetivados de nuestra actividad se vuelvan autónomos,

·        Que estos productos autónomos escapen del dominio o control de los hombres,

·        Que estos productos ingobernables se opongan en su funcionamiento a los fines para los cuales fueron creados y así al propio hombre,

·        Si la enajenación objetiva es vivenciada por los propios sujetos, como conflicto entre la naturaleza social de sus aspiraciones individuales y el carácter individualista de las normas sociales que lo impiden entonces estaremos en presencia de la enajenación subjetiva.

 

De esta manera podemos explicar de forma coherente el tránsito de la objetivación a la enajenación objetiva que puede conducir a la enajenación subjetiva del sujeto en su actividad. Queda aclarado además, ¿por qué? en el capitalismo, no obstante los colosales adelantos científicos alcanzados los procesos y factores sociales se vuelven hostiles y enajenados de los hombres. Mientras que en el socialismo sólo las desviaciones de la teoría política marxista en la práctica social han creado condiciones enajenantes como: excesivo control burocrático sobre la personalidad, el exagerado poder del colectivo sobre el individuo, la práctica de dirigir los esfuerzos humanos a cumplir metas, cifras divorciadas de su connotación social, como ocurrió en Europa del Este.

 

Revisemos a continuación las repercusiones en el campo de la salud de este proceso, que tiene validez para su análisis y erradicación por nuestros profesionales de la salud.

 

Si tomamos en cuenta que la distinción entre Enajenación Objetiva y Subjetiva solo responde a objetivos metodológicos para su mejor comprensión como relación social entre los hombres, que aparece intermediada por las relaciones entre las cosas, proponemos asumir un enfoque integrador que nos explique sus repercusiones en la salud. Este enfoque podría basarse en los diferentes niveles de la actividad humana (social, grupal y/o individual)

I .- Nivel societal:

·        Enajenación de las instituciones sanitarias respecto a las necesidades reales de salud de la población.

·        Enajenación de las tecnologías y recursos sanitarios.

·        Enajenación del carácter de la relación médico paciente: como relación proveedor- consumidor.

·        Enajenación del modo consumista de vida respecto a los requerimientos reales de nutrición.

II.-  Nivel grupal:

·        Enajenación de los desposeídos respecto a los avances tecnológicos de la medicina y la salud.

·        Enajenación de los profesionales de la salud y profesionales afines (de su sentido de la vida respecto al sentido de su actividad profesional)

·        Enajenación de grupos marginales: alcohólicos, drogadictos y otros respecto a la necesidad de preocuparse por su salud.

III.- Nivel individual:

·        Enajenación del individuo (divorcio entre la naturaleza social de sus motivos individuales y el carácter egoísta de las normas sociales que lo condenan al individualismo).

·        Enajenación del individuo por la “pérdida” de su sentido de la vida, que puede conducir a neurosis y suicidios de origen socio – cultural.

·        Enajenación  del individuo – irresponsable con su salud: estilo enajenado de vida.

 

Estas variedades de la enajenación como proceso son también válidas para el análisis de la esfera del deporte y la cultura física, hoy más que nunca marcados por los megaintereses lucrativos del capital, el dopaje de atletas lanzados a obtener jugosas ganancias y no a superar marcas deportivas que contribuyan a enaltecer el espíritu y el cuerpo humano como legítima pretensión humana que dio origen a esta actividad en la antigüedad.

 

CONCLUSIONES

 

Los estudios acerca de la enajenación han estado marcados por la dicotomía que la ha presentado ya bien como fenómeno material (económico), ya bien como fenómeno espiritual (individual).

 

Detrás de la mencionada dicotomía está el desconocimiento de los aportes principales de Karl Marx a su estudio y la división del pensamiento marxista por sectarismo político.

 

El enfoque marxista que proponemos se basa en los estudios precedentes acerca de éste fenómeno, que ha sido abordado por diferentes escuelas teóricas desde el punto de vista de: sus causas (hecho), sus interacciones (relación social) y sus manifestaciones.

 

El enfoque propuesto toma como base el portador de las relaciones de enajenación para delimitar su carácter (objetivo y/o subjetivo) y los diferentes niveles de la actividad humana como el escenario básico para el análisis de los problemas sociales.

 

El modelo teórico que asumimos nos permite establecer los tres niveles principales donde pueden enajenarse los sujetos y los recursos sanitarios así como los del área del deporte y la cultura física.

 

El presente análisis nos permite identificar las mediaciones esenciales en la explicación de la enajenación,  como primer paso para su superación paulatina por la vía de la transformación material revolucionaria en nuestra sociedad, que no obstante su naturaleza humanista está rodeada e influenciada por un mundo en el que se ha impuesto el mercado como única vía de regulación social por parte de los ideólogos del neoliberalismo.

 

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Correspondencia: Lic. Silvio Novoa. Ave. Lenin #4 esq. Aguilera. Rpto: Lenin. Telf: 462936. Correo electrónico: milvio@cristal.hlg.sld.cu

 

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