Trabajo original
Facultad de Ciencias Médicas “Mariana Grajales Coello”.
Electromiografía en músculos temporales en pacientes con bruxismo, Holguín 2004.
Electromyography in Temporal Muscles in Bruxism, Holguin 2004.
Julio César Castaño Curí1, Carmen Mercedes Nocedo Fernández2, Mildred Gutiérrez Segura3, Miguel Orlando Ochoa Rodríguez4.
1 Especialista de primer grado en Prótesis Estomatológica.
2 Especialista de primer grado en Prótesis Estomatológica. Profesor asistente. Clínica estomatológica “Mario Pozo Ochoa”.
3 Especialista de primer grado en Prótesis estomatológica. Profesor instructor. Clínica Estomatológica “Artemio Mastrapa Rodríguez”.
4 Especialista de primer grado en Fisiología normal y patológica. Profesor asistente. Facultad de Ciencias Médicas “Mariana Grajales Coello”.
RESUMEN
Se realizó un estudio de casos y controles en 30 pacientes bruxópatas en la clínica estomatológica docente “Manuel Angulo Farrán”, desde diciembre del 2002 a diciembre del 2003. Los pacientes seleccionados eran mayores de 15 años de edad, de uno u otro sexo, dentados y ofrecieron su consentimiento informado. Se constituyeron tres grupos, uno con bruxismo céntrico, otro con bruxismo excéntrico y un grupo control sin parafunción. El diagnóstico se realizó mediante el interrogatorio y el examen clínico para identificar los signos y síntomas presentes. Se realizaron electromiogramas del músculo temporal derecho e izquierdo en posición de máxima intercuspidación con los objetivos de comparar la amplitud del patrón de contracción entre los tres grupos y determinar la media de dicha amplitud en ambos tipos de bruxismo según los niveles de estrés. El análisis estadístico realizado mostró que las amplitudes del, patrón de contracción del músculo temporal derecho e izquierdo en los bruxistas son superiores a las de los pacientes sanos, los mayores valores de la amplitud del patrón de contracción se alcanzan en el bruxismo excéntrico y a medida que aumenta el nivel de estrés, aumenta su amplitud en ambos tipos de bruxismo.
Palabras clave: Electromiografía, músculo temporal, bruxismo.
ABSTRACT
A cases and control study was done in 30 bruxers patients at “Manuel Angulo Farran” dental clinic, from December 2002 to December 2003. The patients were over 15 years old, male and female and they had all teeth present. Three groups were constituted according to the kind of bruxism (centric or excentric) and control group ( without parafunctional activity). The diagnosis was based on a questionnaire and clinical examination according to the signs and symptoms. Electromyography records of temporal muscles were taken in maximum intercuspal position to compare the amplittude of contractions patterns among three groups and to determine the middle of that amplittude in relation to the level of anxiety. The statistical analysis showed greater activity in bruxers than patients without the habit, more activity in excentric bruxism and an increase of the electrical activity in high anxiety level in both kind of bruxisms.
Key words: Electromyography, temporalis muscles, bruxism.
INTRODUCCIÓN
De los métodos electrofisiológicos, el más conocido para el estudio muscular es la electromiografía (EMG). Se conoce con este nombre a un conjunto de técnicas y procedimientos electrofisiológicos que permiten obtener la actividad eléctrica muscular producida espontáneamente o durante la contracción voluntaria como resultado de las variaciones del potencial de membrana de las fibras musculares (1).
La EMG representa una valiosa herramienta de investigación, así en los primeros estudios se encontraron hallazgos de interés, tal como el registro de hiperactividad muscular en condiciones de reposo en pacientes con disfunción (2, 3).
El comportamiento de la función muscular en el bruxismo ha sido tema de discusión y estudio de varios investigadores a lo largo de los últimos años (4, 5). Al principio, casi la totalidad de las investigaciones se basaban en la observación clínica, hasta que los estudios electromiográficos comenzaron a proporcionar información básica respecto a los fenómenos neuromusculares asociados con este hábito (6, 7).
El bruxismo se puede producir durante el día o durante la noche. Puede ser céntrico o excéntrico, en dependencia de la posición mandibular en que se produzca. En general la bruxomanía diurna, es bruxismo de apretamiento o rechinamiento y se produce en posiciones céntricas o en sus proximidades. El bruxismo nocturno es de frotamiento y se produce en posiciones laterales o protrusivas, por lo que se denomina excéntrico (7, 8).
Se han planteado diversas teorías que tratan de explicar la génesis de esta parafunción, entre ellas las fundamentales son las teorías oclusales, las teorías psicológicas, las teorías centrales y las teorías multifactoriales. El estrés emocional es uno de los factores más importantes que parecen influir en la actividad del bruxismo. Los estudios en que se ha registrado el nivel de actividad de bruxismo, sobre todo el nocturno, ponen de manifiesto un claro patrón que se asocia con hechos estresantes (10-12).
El monitoreo de esta actividad parafuncional se puede realizar a través de registros de actividad motora electrónico portátil, la utilización de equipos de biofeed-back, laboratorios de sueño: polisomnografía con o sin EEG, EMG, etc (13). Los estudios electromiográficos tienen gran uso por ser uno de los de más fácil realización y el que mayor número de elementos para el análisis aporta (14).
Este hábito se asocia con hiperactividad muscular por lo que decidimos realizar esta investigación para comparar la amplitud del patrón de contracción en los músculos temporales derecho e izquierdo en el bruxismo céntrico, en el bruxismo excéntrico y en pacientes sin parafunción y determinar la media de la amplitud de contracción en los dos tipos de bruxismo según los niveles de estrés.
MÉTODO
Se realizó un estudio de casos y controles en 30 pacientes bruxópatas en la clínica estomatológica docente “Manuel Angulo Farrán”, desde diciembre del 2002 a diciembre del 2003. Los pacientes se seleccionaron de los que asistieron a la consulta de trastornos temporomandibulares que cumplían con los siguientes criterios: mayores de 15 años de edad, completamente dentados, de cualquier sexo y con su consentimiento informado. Se distribuyeron en dos grupos: Grupo A, los pacientes con bruxismo céntrico (n = 16) y el grupo B, con bruxismo excéntrico (n = 14). Se creo además el grupo C con individuos sin parafunción (n = 30) con criterios de selección similares a los de los otros grupos.
Se realizó el examen clínico del aparato masticatorio y nos basamos en sus signos y síntomas para el diagnóstico, tales como: apretamiento y/o rechinamiento dental, facetas de desgaste, hipertonicidad o hipertrofia en los músculos masticatorios, sensación de cansancio y/o dolor de los músculos masticatorios y molestias en la ATM. Cuando las facetas de desgaste se localizaron en posiciones céntricas o en sus proximidades se consideró bruxismo céntrico y si se encontraban en áreas no funcionales durante excursiones laterales o protrusivas o ante la presencia de amplia destrucción de tejido dental lo clasificamos como excéntrico(9),(15). Ante la ausencia de signos y síntomas característicos del bruxismo hablamos de un sujeto sin parafunción.
Los electromiogramas se realizaron en el laboratorio de Neurofisiología del Hospital Docente Vladimir Ilich Lenin, con el paciente sentado con la cabeza siguiendo el plano de Camper. Se obtuvieron 5 registros de ambos músculos temporales durante su máxima contracción, en posición de máxima intercuspidación.
El nivel de estrés se evaluó en bajo, medio y alto según el inventario de ansiedad rasgo estado IDARE de Spielberger del que se utilizó la ansiedad como rasgo. Además se contó con la valoración clínica del psicológo.
Los datos obtenidos se vaciaron en una ficha de recolección de información. Se calcularon la media, desviación estándar e intervalo de confianza de la amplitud del patrón de contracción de los músculos temporales derecho e izquierdo y se realizó un análisis de varianzas (ANOVA) antecedida por la prueba de homogeneidad de varianzas. Los resultados se presentan en tablas.
RESULTADOS
La media aritmética de la amplitud del patrón de contracción del músculo temporal izquierdo fue de 79.91, 120.12 y 142.16 para los pacientes sin parafunción, los bruxistas céntricos y los bruxistas excéntricos respectivamente (Tabla1).
Los resultados en el músculo temporal derecho mostraron una media de 145.15 en el bruxismo excéntrico, de 123.75 en el céntrico y de 85.06 en los pacientes sin el hábito (Tabla 2).
La media del patrón de contracción según los niveles de ansiedad fueron en el nivel de medio de 115.27 para el bruxismo céntrico y de 139.79 para el excéntrico. En el nivel alto se obtuvieron cifras de 124.16 en el bruxismo céntrico y de 145.81 en el excéntrico (Tabla 3).
Tabla
1. Media, desviación estándar e intervalo de confianza de la amplitud
del patrón de contracción
del temporal izquierdo según grupo.
Grupo |
Media |
DS |
IC 95% |
Sanos |
79.91 |
3.61 |
[78.56 – 81.26] |
Bruxismo céntrico |
120.12 |
3.67 |
[118.17 – 122.08] |
Bruxismo excéntrico |
142.16 |
3.57 |
[140.10 – 144.23] |
F = 1601.25 p = 0.000
Tabla
2. Media, desviación estándar e intervalo de confianza de la amplitud
del patrón de contracción
del temporal derecho según grupo.
Grupo |
Media |
DS |
IC 95% |
Sanos |
85.06 |
5.36 |
[83.06 – 87.07] |
Bruxismo céntrico |
123.75 |
6.19 |
[120.45 – 127.04] |
Bruxismo excéntrico |
145.15 |
3.76 |
[142.98 – 147.33] |
F = 696.92 p=0.000
Tabla 3. Medias de las amplitudes del patrón de contracción en el músculo temporal según niveles de stress.
Estrés |
Bruxismo |
|||
Céntrico |
Excéntrico |
|||
Media |
DS |
Media |
DS |
|
Medio |
115.27 |
4.14 |
139.79 |
2.08 |
Alto |
124.16 |
4.59 |
145.81 |
2.22 |
DISCUSIÓN
Al analizar la media de la amplitud del patrón de contracción del músculo temporal izquierdo vemos que la misma fue mayor en los pacientes con bruxismo excéntrico en relación al bruxismo céntrico y en ambos grupos fue superior a la de los pacientes sin parafunción. Se puede apreciar diferencia significativa entre las medias de los diferentes grupos según el análisis de varianza utilizado. La amplitud del patrón de contracción del temporal derecho se comportó de manera similar a lo que explicamos con anterioridad.
Los resultados por nosotros obtenidos, hablan a favor de un aumento en la actividad contráctil manifestada por un incremento significativo de la amplitud del patrón de contracción de estos músculos en los bruxistas, tanto céntricos como excéntricos, lo que se explica por la actividad parafuncional desarrollada en este hábito.
El músculo temporal, participa de forma muy activa en los movimientos excéntricos de la mandíbula, específicamente en la lateralidad por contracción ipsolateral de sus fibras medias y posteriores y contralateral de sus fibras anteriores, además de participar en el movimiento de retrusión por contracción bilateral de sus fibras posteriores(4, 16).
Debido entonces a la función de los músculos temporales, y a la posibilidad de la presencia de interferencias oclusales en el trayecto del movimiento por estos músculos generados y sumado a esto, el hecho de que es el músculo temporal el más susceptible a las interferencias oclusales, cabría pensar que las mayores amplitudes del patrón de contracción del músculo temporal, se alcancen en el bruxismo excéntrico, en el cual hay una tendencia más que al apretamiento a la fricción de los dientes.
Al analizar la diferencia que obtuvimos entre las medias en ambos tipos de bruxismo en relación al nivel de estrés se aparecia que es mayor en el nivel alto de estrés con respecto al nivel medio y que los mayores valores se registran para el bruxismo excéntrico en ambos niveles.
Las observaciones clínicas indican claramente que el estrés emocional puede influir de manera importante en la actividad de los músculos de la masticación. Cuando un individuo experimenta un nivel elevado de estrés emocional, una respuesta frecuente es que el sistema gamma eferente altere la sensibilidad de los husos musculares, ello aumenta la sensibilidad del músculo a la distensión, dando lugar a un incremento de su tonicidad (4).
Los resultados por nosotros obtenidos, evidencian un incremento de las medias de las amplitudes del patrón de contracción, lo que se traduce en un aumento de la actividad contráctil para ambos músculos temporales en los dos tipos de bruxismo, en presencia de un nivel alto de estrés en comparación con un nivel de estrés medio. Resultados similares han sido descritos por diferentes autores (4, 17-18).
En el bruxismo excéntrico predominan las contracciones isotónicas, por lo que se mantiene el tono muscular y disminuye la longitud de las fibras musculares y esto se traduce en una mayor amplitud en el registro de su contracción al compararlo con el bruxismo céntrico.
CONCLUSIONES
Como resultado del análisis realizado podemos plantear que en nuestra investigación encontramos que las amplitudes del patrón de contracción del músculo temporal derecho e izquierdo en los bruxistas son superiores a las de los pacientes sanos, los mayores valores de la amplitud de contracción se alcanzan en el bruxismo excéntrico y a medida que aumenta el nivel de estrés, aumenta la amplitud del patrón de contracción de los músculos temporales, tanto en el bruxismo céntrico como en el excéntrico.
BIBLIOGRAFÍA
Correspondencia: Dr. Julio César Castaño Curí. Edificio 52. Apartamento 4. Reparto Pedro Díaz Coello. Holguín.